Compostas y Lombricompostas

Los abonos orgánicos son una opción muy recurrente al momento de querer aportar nutrientes a nuestras plantas ya que estos productos no han llevado un proceso sintético para potencializar la disponibilidad de nutrientes. Existen diferentes tipos de abono orgánico y dependiendo el caso; la manera de transformación de la materia orgánica y la manera de aplicación a las plantas serán diferentes.

Dos de los métodos más comunes y mayormente adaptables para producirlas en casa; son las compostas y lombricompostas. En donde a partir de estas podremos obtener dos tipos de fertilizante, uno sólido y otro líquido.

Las compostas llevan un proceso especial y también son conocidas como compostas calientes ya que pasan por diferentes etapas variando su temperatura, lo que provoca que todo ese “desperdicio orgánico” se transforme. En este proceso existen diferentes agentes que actúan eficazmente para la transformación, aunque los principales protagonistas son bacterias y algunas especies de hongos.

Por el otro lado en las lombricompostas, las principales protagonistas son las lombrices, específicamente la lombriz roja californiana conocida también por su nombre científico como Eisenia Foetida; estas lombrices “devoran” los residuos y por medio de su aparato digestivo lo transforman en el “humus de lombriz” también en este proceso se segregan ciertos líquidos que dan como resultado un fertilizante llamado Lixiviado.

Para la creación de estos dos abonos es necesario integrar los elementos adecuados y evitar que se alteren los procesos de transformación.

En el caso de las compostas, los elementos son mayormente “permitidos” ya que podemos integrar gran diversidad de residuos, tales como papel, tortillas, residuos de frutas, verduras, chiles, ajos, cebollas, cítricos, elementos verdes, residuos de café, cascara de huevo, etc.

Pero si tienes en desarrollo una lombricomposta, aunque el proceso es más rápido, los elementos van a limitarse un poco, ya que no está permitido añadir restos de cebolla, chile o ajo por que podrían actuar como repelente y dañar a las lombrices, tampoco es recomendable añadir demasiados cítricos o restos de café debido a que disminuiría demasiado el pH y las lombrices no tolerarían esas condiciones por lo que empezarían a escapar.

Como ves hay algunos elementos que pueden ser compatibles y algunos otros que se limitan dependiendo la elección que hagas, pero hay algunos que definitivamente NUNCA DEBES AGREGAR; no importa si se trata de una composta o una lombricomposta pero nunca debes de agregar orina, materia fecal de mascotas ni mucho menos los residuos del sangrado menstrual, seguramente habrá muchas personas que te inviten a hacerlo alegando que son residuos completamente naturales y muy benéficos, lo cual no es del todo erróneo, sin embargo también es cierto que estos elementos tienen grandes cantidades de bacterias e inclusive virus que podrían ser contaminantes para las plantas. Además de ser diferentes en cada persona, o es que acaso ¿Todas las personas tenemos los mismos elementos en la orina? ¿Y en la sangre? ¡Por supuesto que no! Esto depende mucho de nuestra genética, de nuestros hábitos alimenticios, de la zona en la que vivamos, de los padecimientos que tengamos, etc. Son muchos puntos a tomar en cuenta y NO HAY ningún estudio científico que respalde con argumentos sólidos el uso de estos elementos para compostas o para aplicarlos de manera directa a las plantas. Así que, por favor, no te dejes engañar por aquellos “PSEUDO - INFLUENCERS” o “PSEUDO-AMBIENTALISTAS” que promueven estas integraciones.

Si te interesa aprender sobre cómo realizar abonos orgánicos en casa de manera eficiente y eficaz, recuerda que tenemos un CURSO DE ABONOS ORGÁNICOS para ti; en donde profesionales en el tema te enseñan y explican todo lo necesario para producirlos de manera adecuada.